El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Vigo ha condenado al Servizo Galego de Saúde (Sergas) a pagar 8.471 euros a una paciente que se trató por la privada ante el “retraso” de la sanidad pública. En la sentencia, que es firme y contra la cual no cabe interponer recurso alguno, el magistrado explica que pese a que la dolencia no suponía un riesgo grave para la salud de la persona, sí ha quedado demostrada una “atención defectuosa” por parte del Sergas. Por ello, la mujer decidió tratarse en la privada, asumiendo ella el coste, que ascendió a 6.471 euros. Ahora, el juzgado suma 2.000 euros más a la indemnización a percibir por los daños y perjuicios causados.
“Entiendo que es justo el reembolso a la actora en la medida en que han sido gastos que no tenía el deber de soportar, que los ha afrontado debido a la parsimonia e inacción de la demandada (el Sergas)”, subraya la sentencia. El juez considera acreditado el retraso terapéutico, por la “demora indebida” en la puesta a disposición del paciente de los medios conocidos para su tratamiento
Los hechos juzgados comenzaron en marzo de 2018, cuando la paciente acude a la sanidad privada para hacerse una ecografía abdominal, donde le hallan síntomas de una posible lesión benigna en la vesícula. Por ello, acude en varias ocasiones a su centro de salud y al servicio de digestivo del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI), hasta que en 2019 se le realiza otra ecografía en la sanidad pública, hallando resultados similares, por lo que se le establece un plan para revisarlo.
Sin embargo, ella vuelve a la privada, donde una nueva ecografía confirma hallazgos altamente sugestivos de dicha enfermedad, por lo que se le prescribe una intervención preferente por el riesgo de complicaciones futuras. Así, acude de nuevo al Sergas con ese diagnóstico, pero finalmente fue operada por la privada en septiembre, asumiendo ella el coste