La contaminación, que causa siete millones de muertes prematuras al año en el mundo, es «el mayor problema de salud pública», asegura María Neira
La Nueva España J. M. Requena 20.10.20
La contaminación atmosférica es «el mayor problema de salud pública al que nos enfrentamos, por encima del tabaco». Así lo aseguró ayer, en la conferencia de clausura del 41.º congreso nacional de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria la doctora española María P. Neira, Directora del Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Neira incidió ayer en que «el 92% de personas que viven en ciudades no respiran aire limpio» conforme a los estándares aconsejados por la OMS. Y es que, para la veterana facultativa, «la exposición a aire con mala calidad es una de las cuestiones que más nos preocupan», pidiendo así «luchar entre todos para paliar este problema, que es enorme». No en vano, Neira aseguró que «los médicos no podemos limitarnos a tratar al niño que viene aquejado de asma, sino aprovechar nuestra influencia para evitar que esto ocurra» cambiando la forma en la que se construyen las ciudades o variando las formas de transporte mayoritarias.
La doctora asturiana incidió en que «más del 80% de las ciudades del mundo tienes niveles de contaminación que superan los límites establecidos por la OMS sobre la inocuidad del aire», establecido en 10 microgramos por metro cúbico de aire. Para Neira, la contaminación atmosférica es «uno de los mayores riesgos para la salud del mundo». No son aseveraciones realizadas al vuelo, sino refrendadas con datos.
Siete millones de muertes al año por aire contaminado
«Al año se producen 7 millones de muertes prematuras debido a la exposición a aire contaminado», 400.000 de ellas solo en el continente europeo, con lo que la contaminación está considera como «la asesina silenciosa». Así, la polución está detrás del 30% de las muertes por cáncer de pulmón, el 24% de los ictus cerebrales o el 25% de los infartos. En la última década, la contaminación atmosférica mundial subió un 10%.
Además, si a la contaminación ambiental sumamos todos los factores ambientales de riesgo, como la contaminación de las aguas, el uso de pesticidas o la exposición a agentes químicos, estos factores suponen 12,6 millones de muertes al año, un 23% de la mortandad mundial.
No son los únicos problemas derivados de la polución. «La contaminación ambiental atrofia el cerebro de los fetos», advirtió Neira, que incidió en que también favorece el desarrollo de enfermedades o una mayor posibilidad de sufrir ictus o diabetes. «Nos estamos jugando el futuro de nuestros hijos», explicó la doctora, que explicitó que «estamos poniendo en riesgo nuestro coeficiente intelectual como sociedad».
Con todo, la facultativa quiso dar una mensaje de esperanza. «En los últimos años estamos avanzando mucho en concienciación y sensibilización», enfatizando que «una sociedad que invierte en energías limpias está invirtiendo en salud» y remarcando que «en España, las energías renovables nos sobran, solo falta apostar por ellas».
Y es que Neira quiso insistir ayer en el papel del Estado para mejorar esta situación. «El Estado tiene una gran influencia en la salud de las personas», pero también las administraciones municipales, ya que «los alcaldes son los mejores ministros de Sanidad», llamándoles a «promover políticas en pro de la mejora de la salud de sus conciudadanos». Más aún cuando, explicó, «las energías limpias no van contra la economía, sino que son un gran oportunidad de negocio».