FUENTE: Postino No_Grazie_Pago_Io postino.nograziepagoio@gmail.com
Después de muchos anuncios, declaraciones y notas de prensa, finalmente se han publicado los primeros.
Resultados del estudio de fase 3 para las vacunas Pfizer y Moderna. Ambas basadas en la innovación
tecnológica de un fragmento de ARNm viral insertado en una nanopartícula de grasa.
En primer lugar, los artículos publicados fueron escritos por investigadores pagados por las dos empresas y, por lo tanto, con conflictos de interés (CdI). Si hubieran sido investigadores independientes, podríamos tener mayor confianza en los resultados.
Además, como escribe Peter Doshi en su blog del BMJ, los datos sin procesar no están disponibles, y probablemente no lo estarán durante los próximos años, por lo que no estamos del todo seguros de que Pfizer y Moderna no nos oculten nada.
En este momento, debemos conformarnos con lo que hay.
Cabe destacar que en los resultados no hay datos de mortalidad, ni en general ni específicamente por el Covid-19, con excepción de la muerte registrada en el grupo de control del estudio Moderna. Obviamente no hay datos, ya que la mortalidad no estaba entre los resultados previstos por los protocolos del estudio; ya que se habría necesitado una muestra mayor en el tiempo y con mayores costes. pero las empresas y los gobiernos no estaban dispuestos a esperar. Sin embargo, todos esperan que las vacunas reduzcan las muertes.
Tampoco hay datos sobre la prevención de casos asintomáticos o poco-sintomáticos. Los casos que se citan corresponden a las definiciones clínicas de la FDA y son enfermos con sintomatología clara. Por tanto, estos estudios no nos permiten establecer si la vacunación ayudará a detener la transmisión. Por otra parte, se desconoce la duración de la inmunidad post-vacunación. Lo que hace que sea difícil, si no imposible, respaldar la hipótesis de que la vacunación permitirá alcanzar la inmunidad colectiva.
Los artículos no mencionan el NNV (número necesario para vacunar), es decir, el número de individuos que es preciso vacunar para evitar un caso o caso grave de Covid-19.
Además de estimar la efectividad de las vacunas, los dos estudios se realizaron para evaluar su
la seguridad. El tamaño de las muestras y la duración de los seguimientos (alrededor de dos meses) no nos permiten saber los eventos adversos raros, graves o tardíos, y conocemos tan sólo las reacciones inmediatas y los efectos locales que son temporales (dolor, enrojecimiento, hinchazón, linfadenitis).
– Polack FP, Thomas SJ, Kitchin N, et al. Seguridad y eficacia de la vacuna BNT162b2 mRNA Covid-19. N Engl J Med 2020; 383: 2603-15
– Baden LR, El Sahly HM, Essink B, et al. Eficacia y seguridad de la vacuna mRNA-1273 SARS-CoV-2. N Engl J Med. 2020 30 de diciembre. DOI: 10.1056 / NEJMoa2035389
– https://blogs.bmj.com/bmj/2021/01/04/peter-doshi-pfizer-and-modernas-95-effective-vaccines-we-need-more-details-y-los-datos-brutos /
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